Escritores Club forma parte del portal de literatura Escritores Libres y pretende convertirse en una propuesta cultural innovadora, capaz de ofrecer al lector la oportunidad única de conocer sus autores favoritos y dialogar con ellos directamente, sin intermediarios. Hemos reunido los mejores escritores independientes del panorama literario actual, dispuestos a ofrecernos su talento y sus valoraciones, no sólo sobre sus obras, sino sobre la literatura en general y el mundo que la rodea.

Esperamos que encontréis aquí respuestas a algunas de vuestras inquietudes y también un momento de esparcimiento, acompañados de la mejor literatura.

lunes, 11 de febrero de 2008

Bebé Adrih Sueña (Fragmento 3)

Pequeño navegante de ilusiones, cuando el recuerdo de la iguana triste viene a posar su canto lastimero, sobre tu frente pura de lucero, por tu mejilla suave se desliza una gota preciosa de diamante, la que muy pronto ha de volverse perla en la sublime mano de tu ángel”. Pequeño navegante de ilusiones, cuando rompa la fuente de mamá y el ángel su guirnalda de orquídeas te corone, la que el Hada tejió de bellas flores, para adornar el borde de tu cuna, la aurora traerá sus bellas mariposas, en tu jardín florecerán mil rosas y en cada una de ellas, esperará dormida la preciosa Hada Azul de la Esperanza... esperará paciente, hasta que tú pequeño la despiertes".
---------
Un solitario búho muy viejo y silencioso los observa de lejos; enigmático, triste se mece en su ramita, cabeceando y sin poder dormir, mientras la araña teje su red de cazadora, diligente y ansiosa, espera su alimento. Pensando está que el taciturno búho, encierra un gran enigma, un ancestral misterio. Aquel temor oculto ha hecho que se ericen sus diminutos pelos y huye despavorida. Se olvida de su presa y también de la red. Expectante ha encogiendo sus patas temblorosas, detrás de una hoja seca. Allí llegó la ardilla apresurada causándole un gran susto. La araña le ha contado la sospecha que tiene del búho solitario.
la ardilla ha decidido demostrar a la hábil tejedora, que su temor no tiene fundamento.
Por esto le ha pedido al ebrio ruiseñor, que deje de tocar su gran tambor. Al llanero soldado y a la Garza del Sol, insistente les dice que cesen la cumbiamba, el guarapo y el ron.
bebé adrih sueña
_¡Ya es hora que termine toda esta algarabía! con voz chillona y fuerte ha gritado la ardilla, levantando su cola espelucada aplaudiendo severa, mientras nerviosa mueve la nariz y se dirige al búho solitario. ­ -Hay alguien que hoy les quiero presentar, ya que no hemos tenido el privilegio de escuchar su historia.
_Señor búho taciturno: ¿También su hogar se encuentra entre las páginas deterioradas de algún mágico libro de hechiceros y duendes? pregunta un colibrí pantaloncito blanco, que apresurado vino y ha dejado su nido abandonado, entre las hojas de un árbol canelo.
Ya que ustedes insisten (Dice con voz pausada y ronca el búho) Buscaré en mi memoria algo perdida, incoherente, tímida y sombría, en el baúl añejo de la vida, historias escondidas en árboles caídos, que al susurro del río, cuentan leyendas de viejos chamanes adornados con plumas de quetzales, danzando con sus gritos estridentes, sobre las fumarolas de grandiosos volcanes”.

Por un breve momento el búho se ha quedado pensativo, como buscando entre su libro roto de recuerdos perdidos algún nombre especial, el de una niña india, un valiente guerrero, o un lugar escondido en follajes espesos, que dirija el camino, entre flechas perdidas y vasijas de barro enmohecido.

-Hace ya muchos años, solí ser la mascota de un valiente chamán, cuyo mayor tesoro era una hermosa india y sus pequeños hijos inocentes, esquivos, temerosos, que pasaban conmigo largas horas a la orilla del río. En tiempos muy lejanos, se prolongó la guerra, muchas vidas valiosas se perdieron en las arduas batallas. ¡Allí al gorrión se le extinguió la vida!. y los indios guerreros al morir, dejaron que su espíritu escapara para vivir ocultos en los guácharos, aves nocturnas de plumaje pardo con manchitas blancas que brillan como si fueran lágrimas, recordando el amargo sabor de la derrota.
bebe adrih sueña La vieja comadreja, cuando evoca esos tiempos, aún desconsolada llora y los robles morados, en sus troncos tallaron sufragios, donde cuentan esta historia. El venado conejo, corrió despavorido y el oso platanero, de llorar tanto, se quedó dormido”.
bebe adrih sueña
“Así narran los bosques esta historia, con sus palabras húmedas de frío la historia que hace tiempo se ha escuchado, de la funesta Cueva de los Guácharos, donde el gorrión de pánico temblando, muy tristemente se quedó dormido”.
bebe adrih suela
“Sobre las hojas tiernas, de un bello frailejón,
Desconsolado llora un pequeño caracol”
También he de contarles (prosiguió el viejo búho) que existen estoraques esculpidos al sol, que semejan trofeos gigantescos; de allí bellas montañas se divisan bañadas por quebradas cantarinas; primorosas colinas y bosques taciturnos, que guardan en sus cuevas vestigios ancestrales de culturas antiguas; fantasmas de guerreros, caciques que dormitan entre urnas funerarias y en las noches transitan, arrastrando cadenas... y se escuchan gemidos angustiosos y golpes de tambores, que en las paredes chocan como inmensos vampiros, asustando a la urraca, al conejo, al grillo y a los valientes zorros, que huyen despavoridos, mientras el Sapo Bufo y el Sapo Mamboré sonríen escondidos, donde nadie los ve.
bebe adrih sueña
¡La ardilla corre sorpresivamente y todos gritan a una sola voz,
un gavilán que perplejo escuchaba, de un solo golpe al suelo se cayó!
El colibrí chismoso, preguntón, de temblar tanto...tanto...
¡Sin su pantaloncito blanco se quedó! Y tiritando está,
avergonzado, oculto entre una rosa....
¿Y que decir de la Garza del Sol? A punto de sufrir un leve infarto,
se desmayó, sonriendo entre las alas del Soldado Garzón.

Y así como llegó el extraño búho envuelto entre la bruma misteriosa, de su vida quedó solo el recuerdo y la pregunta obvia: ¿Será este búho el mismo que está inmóvil, acompañado del chamán sonriente y el águila que observa silenciosa, también plasmada en una piedra inerte? ¿O invisible estará en la misma rama soñando estar dormido, en el hombro de aquel sincero amigo, que descansa en las urnas funerarias, donde atento vigila el Sapo Bufo, el conejo y el grillo?

Fragmento del libro Bebé Adrih Sueña
bebe adrih sueña
Marta Lilián Molano L

No hay comentarios: