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miércoles, 11 de febrero de 2009

Todo tiempo pasado era mejor


Que maldita costumbre tenemos de citar esta frase trillada....Para justificar algo que no nos parece justo, no nos agrada o no entendemos del presente o la actualidad. Así caemos en el "todo tiempo pasado era mejor".
Cómo los saltos evolutivos, por más que no sean de nuestro agrado, no se pueden modificar, ...es una forma de echar culpas al presente, escudándonos en el tiempo pasado. De esta manera no nos sentirnos artífice del cambio o de la necesidad de tomar partido del hoy y por lo tanto en pos del futuro.
Por supuesto que muchos valores del pasado se han perdido, pero también hemos evolucionado mucho. Voy a citar uno de muchos ejemplos, la factoría de animación infantil.
Decimos que los dibujos animados en la actualidad son violentos, pero en el pasado también lo eran, al igual que los juegos (en su mayoría bélicos para los varones) y maternales para las niñas.
La imaginación y los límites en la educación quedaban reducidos a la frase: va a venir el lobo si te portas mal. Un error horror subsanado, aunque los límites "hoy" se deben replantear, porque son necesarios para aprender a ser. El no sin justificación aparente no reporta aprendizaje, el dejar hacer es peor aún.

La diferencia es que en la actualidad tenemos la posibilidad de elección en todos los sentidos, al igual que acceso a la información para modificar errores transmitidos de generación en generación...Entre otros para construir una maternidad-paternidad responsable, participativa, sin culpas y frustraciones que transmitimos a nuestros hijos. La maternidad-paternidad toma otras dimensiones.

Gracias a los DVD, Intenet y canales contratados o eliminados de nuestro sistema de televisión terrestre o por cable podemos elegir lo que deseamos que nuestros hijos vean.
Se podrían rescatar elementos positivos del pasado como los cuenta cuentos por radio, pero recursos en la actualidad no nos faltan....y el ocio infantil está muy contemplado por padres, educadores y comunidad. No es nada difícil encontrar espacios recreativos y lúdicos para los niños. Otra justificación del pasado, es que cuando niños podíamos jugar en la calle, pero aunque no existieran los pederastas (mal conocido en todos los tiempos, pero sin calificativo en el pasado), tampoco el parque automotor era tan amplio, ni el tránsito vehicular tan acusado.
Pero aunque viviéramos en un pueblo de 100 habitantes y 4 coches, les aseguro que nuestros hijos serían supervisados por los padres. No por convertir a nuestros bástagos en niños sobre protegidos y débiles, sino porque hoy la responsabilidad de la paternidad es más participativa. A pesar de la madre trabajadora y la figura de los abuelos educadores.
En la actualidad, las madres de niñas sabemos las estereotipias que causan las barbys o las más modernas Bratts, al igual que los juguetes armamentísticos para los varones.....también reconocemos que muchos cuentos infantiles de nuestra infancia, estereotipan a la mujer y a su máximo logro de género: encontrar al príncipe azul de los cuentos.

Muchas veces me han enviado mails melancólicos recordando sucesos de nuestra infancia, en los que dejaban un "mensaje de trasfondo" errado. No éramos más sanos o fuertes porque no usábamos cascos para la bici, porque nos dejaban trepar a los árboles sin control alguno, porque hacíamos una pelota de trapo o no respetábamos a los animales y el medio. Los tiempos han cambiado, si no queremos niños obesos frente a la tele o la consola.....podemos dar opciones recreativas y creativas en donde participar de la educación de nuestros futuros hombres y mujeres......Trepar a los árboles, remontar un cometa y andar en bici.....también podemos hacerlo con nuestros hijos.
En el pasado se cometieron muchos errores, algunos de ellos por la falta de participación en la educación lúdica de nuestros hijos y por falta de educación de los padres en cuanto a psicopedagogía, hasta en temas de alimentación y salud. Debíamos ser "creativos" para divertirnos, porque no EXISTÍAN LOS RECURSOS, ni se tenía en cuenta la magnitud y la importancia de la educación como se tiene en la actualidad. No existían la gama de actividades, ni tampoco la cantidad de herramientas de animación.
Antes de decir "todo tiempo pasado era mejor", revisemos el qué y el cómo podemos rescatar lo positivo e incluirlo en el presente, con sus lógicos cambios evolutivos sociales, tecnológicos y humanos.

2 comentarios:

rudy spillman dijo...

¡Bravo, Flor! Despiertas la conciencia de los padres y porqué no, también de los que estén por serlo.
Besos.
Rudy

Juan Carlos dijo...

Mirar al pasado con melancolía buscando el paraíso perdido es algo innato al ser humano. Rousseau hablaba del noble salvaje corrompido por la sociedad, pensando que los salvajes vivían en armonía con su entorno, cuando lo cierto es que el hombre siempre ha sido igual de destructivo y que lo único que ha variado es su capacidad devoradora del entorno.

Otro aspecto de esta cualidad humana es el enquistamiento de la tradición, supravalorada como algo inmutable para muchos. En su nombre se mantienen en España fiestas lamentables con el maltrato animal como protagonista, como si estuviesemos condenados por un extraño determinismo a repetir una y otra vez las salvajadas que hacían nuestros antepasados y además estar orgullosos de ello. Al parecer se olvida que la historia del hombre es la historia de una sucesión de tradiciones abandonadas y mutadas en otras.

El problema es que nos gusta tan poco nuestro presente como sociedad que buscamos el ideal en el pasado o en el futuro, en una fuga de nuestra verdadera responsabilidad, que no es otra que cambiar el presente, si es que no nos gusta.

Una buena manera de conseguir este cambio es mejorar la educación de nuestros infantes y en eso, Flor, nos das lecciones cada día.

Un saludo,
Juan Carlos